martes, junio 30, 2009
lunes, junio 29, 2009
Cocktail Slippers
Recién descubiertas y me encantan. Que detrás esté el pequeño Steve obviamente no tiene nada que ver.
Publicado por Daeddalus 3 perdidos en el laberinto
Etiquetas: High fidelity
La conversación deriva hacia la pornografía, tan masculina por lo general y tan poco creíble en particular para mi persona y pasa por enumerar todo aquello que jamás haríamos en la cama (o donde proceda), a saber, ponerse un cinturón de castidad, intercambio de parejas, sexo anal (ellas se lo pierden), un trío con dos tíos, el salto del tigre, sexo cibernético, coprofilia o la doble penetración entre otras muchas otras prácticas y/o convenciones sexuales que ya no recuerdo, ante la incomprensión o la afirmación de los demás (yo de eso ni muert@ o tú te lo pierdes).
A mí sólo se me ocurre enumerar una cosa, por naturaleza soy de escasa tedencia hacia los besos, pero lo que nunca, nunca haría, sería plantarle un beso en la boca al tipo (de momento sigo siendo heterosexual) con el que acabo de dar o recibir sexo oral.
Publicado por Daeddalus 13 perdidos en el laberinto
Etiquetas: Geografía privada
domingo, junio 28, 2009
Publicado por Daeddalus 7 perdidos en el laberinto
Etiquetas: Anatomía de la señaldá
viernes, junio 26, 2009
SIempre me gustó la canción de Van Morrison, al margen de la fascinación que tan sólo un tipo tan esperpéntico como él puede ejercer sobre mí.
Tuvo el buen gusto de elegirla para tono de su teléfono móvil. Cada vez que se oye al otro lado de los armarios sé que él acaba de llegar y aun a riesgo de parecer cursi, justo en ese instante, amanece para mí.
P.D. La canción, obviamente, Brown eyed girl.
Publicado por Daeddalus 7 perdidos en el laberinto
Etiquetas: Persigo un sueño... mañana seguiré
miércoles, junio 24, 2009
Esto no es una canción de amor
"... todo el mundo lo sabe,
no hay día sin noche,
dicen que el amor es igual que el humo
después del fuego no hay remedio alguno"
Ni se imaginan lo mucho que siempre me ha gustado esta canción, supongo que no necesita presentación, pero por si acaso hay algún despistad@, es de Mr. Cohen y la canta esa Diosa llamada Emmylou Harris en un disco llamado "Cowgirl's prayer".
Llevaba muchó tiempo persiguiendo una versión en castellano que se hizo en un homenaje a Cohen en Cataluña y hace muy poquito, en ese foro que todo lo puede, Springsteencorner, obviamente, la encontré medio escondida. Eso me recuerda lo mucho que lo maltrato y lo poco que lo visito. Cortesía de Perla Batalla y Javier Colis, ya saben, la que siempre fue corista del señor Cohen y un tipo que a mí me recuerda a Corcobado, Javier.
Publicado por Daeddalus 5 perdidos en el laberinto
Etiquetas: High fidelity
De aburrimiento y fobias
De este modo paso la mañana como mejor puedo, que nunca es suficiente: leyendo periódicos, estudiando a ratos, cambiando expedientes de sitio, navegando por internet visitando portales inmobiliarios y mirando la vida pasar por la calle Coronel Aranda.
El de hoy ha sido un día más ocioso, si cabe, de lo habitual, así que a falta de mejores ideas, que no es que no las tuviera, simplemente las fui desterrando una a una, me dediqué a observar el atuendo e indumentaria de mis colegas masculinos (ganan por goleada) llegando a una pavorosa e infame conclusión. ¿Desde cuándo se han puesto de moda las camisas de manga corta?
No es que a mí me importen y/o preocupen los estilismos masculinos, nada más lejos de la realidad, pero el ocio es lo que tiene, que una acaba fijándose en lo más insospechado y descubriendo una nueva fobia, las camisas masculinas de manga corta, que se coloca en la ya larga lista preexistente justo entre los cacahuetes y los conductores usuarios del claxon de sus vehículos.
Podrían aprender todos ellos de nuestro querido (y lo digo sin ironía) Jefe de Servicio, siempre impecable con sus polos ceñidos marcando bíceps. Él si sabe, y cuando luce camisas siempre son de manga larga y como es pertinente se remanga las mangas dando paso a un moreno deslumbrante (me pregunto si tomará rayos uva).
P.D. La canción... es que me he pasado toda la mañana tarareándola sin saber muy bien por qué. En todo caso va por M., él sabría por qué.
Publicado por Daeddalus 5 perdidos en el laberinto
Etiquetas: Desayunando en Tiffany's
martes, junio 23, 2009
Exorcismos en llamas
Publicado por Daeddalus 6 perdidos en el laberinto
Etiquetas: Tiempo de habitaciones separadas
lunes, junio 22, 2009
Adicciones, circunstancias y deseos
Poseo una larga lista de adicciones, circunstancias y deseos. En términos generales no excesivamente preocupantes (exceptuando que en ocasiones sí lo sean para mi tarjeta de crédito) y en ningún caso ilegales (aunque lo contrario no creo que me supusiera mala conciencia). Los zapatos imposibles que duermen el sueño de los justos en el fondo del armario, los sugus de cereza, los regalices o los bombones Godiva y los helados con toffe del McDonalds, ciertas causas perdidas y la coca-cola (de ambos me estoy quitando), la limonada y Bruce Sprinsgteen, los marcapáginas y subirme a aviones que me lleven lejos o la reciente devoción adquirida por los acantilados de Cornwall, se unen a la ruina (económica) que suponen para mí los vaqueros, los tejanos o los blue jeans (elijan ustedes la palabra que les plazca).
Desconozco el número de ellos que habitan en mis armarios, sólo sé que siempre que voy de compras, y voy de compras a menudo, aunque no sea mi intención comprarme unos vaqueros, siempre acabo pagando unos en la caja. Incluso a veces, si me sientan bien (dentro de lo posible) o están rebajados o cualquier otra circunstancia que (no) lo justifique por el medio, los compro por pares (lo que no me supone necesariamente ahorrarme la siguiente compra).
Si unimos lo anterior a un ligero pero ya firmemente arraigado síndrome de Diógenes en cuestiones de vestuario, nos encontramos con un número elevadísimo de pantalones vaqueros y una ínfima probabilidad de repetir atuendo. Tal extraña coincidencia se dió esta mañana, hoy me puse unos vaqueros que había estrenado exactamente el 20 de julio de 2008 y no había vuelto a ponerme hasta hoy. En fin, que fue sacarlos del armario, reconocerlos y teletransportarme a aquel fin de semana (de cuatro días) en Barcelona.
Estos pantalones, los que aún llevo puestos - Confesaré que aún estoy en el trabajo, en esa incierta hora del mediodía donde todo funcionario de bien se va a casa, nos apagan las luces (curiosos métodos de ahorro de esta Administración), por fin los teléfonos no suenan y una trata de rellenar las más de 37 horas semanales de obligado trabajo como mejor puede- podrían contar muchas historias, o tal vez tan sólo una (tal vez deberías interrogarlos a ellos y no bucear aquí en búsqueda de lo que allí pasó. No tengo ninguna intención de contarlo, al menos no por el momento).
P.D. El sábado me fui de compras. Quería comprarme un vestido. Este viernes tengo comida con mis ex-compañeras y de recibo es aparecer vestida y radiante con la sonrisa de felicidad pintada en la cara aunque sea a brochazos de autobronceador y rímmel negro. En estas situaciones una siempre tiene que regresar triunfante y destilando no sé muy bien qué, así que la elección de atuendo es crucial.
Pues eso, yo quería un vestido, y me chiflan, cuando los veo en las demás, esos vestidos extralargos a riesgo de parecer padecer un embarazo de ocho meses, pero en mí no acaban de convencerme. Ya estuve tentada el verano pasado, pero entre que estaba diseñado por Pe y Mo (las hermanísimas Cruz, motivo éste más que suficiente para negarme de plano a comprarlo) y los 80 euros que probablemente iban a quedar colgados en el armario sin llegar a ver la luz no acabé de decidirme. Este sábado fui reincidente, acabó en el vestidor y yo obviamente me fui con unos vaqueros (y una camiseta, pero ésta no cuenta). Para el viernes tendré por tanto que pintarme las uñas y elegir unas sandalias lo suficientemente altas y adecuadas al glamour que una pretende destilar en tan magno acontecimiento.
Publicado por Daeddalus 8 perdidos en el laberinto
Etiquetas: Desayunando en Tiffany's
domingo, junio 21, 2009
Coordenadas
Por mi parte sigo pensando y tratando de averiguar cuáles son los míos. Al margen de los evidentes, ¿ser feliz?, ¿no estar triste?, no tengo claro que venga a ser lo mismo. ¿Pedir cita de una p* vez en el dentista?, ¿enamorarme?, ¿dedicarme a la búsqueda de piso en serio?...
Estoy cansada de compartir piso o de vivir de prestado, de tener que desplazarme durante una hora para llegar el trabajo y de madrugones y trenes llenos de gente a las seis y media de la mañana (ingenua de mí, yo pensé que en este país la gente no madrugaba).
A Dios pongo por testigo que llegaré a septiembre hipotecada (y enamorada). Aunque mi experiencia hasta el momento en materia de vivienda me remita a la que tengo con los hombres ("querida, te quedarás sola, porque lo que tú exiges simplemente no existe") lo que me puedo permitir no me gusta y lo que me gusta no puedo permitírmelo.
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Etiquetas: Acuse de recibo, Corazón de Frankenstein
sábado, junio 20, 2009
Apostasía
También sé que elijo siempre mal, que me tientan en exceso los abrazos comprometidos y los regalos fortuitos. Pero estoy dispuesta a reformarme, tan sólo quiero la oportunidad para poder demostrarlo.
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Etiquetas: Área de prioridades
Resumiendo (que no siempre es gerundio)
Cuando todo terminó le dije a mi conciencia que nada había pasado. Durante un tiempo debió creerme y me permitió dormir por las noches.
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Etiquetas: Persigo un sueño... mañana seguiré
Desafiando
Hoy me levantado y tras desayunar me he vuelto a meter en la cama. No tenía nada que hacer, nadie me esperaba, ni planes ni citas y ni siquiera sueño, pese a que por la ventana un sol radiante invitaba a desperezarse (duermo con la ventana abierta y la persiana subida). A medio vestir me tumbé de nuevo y acabé por dormirme hasta las doce con la esperanza de que al despertarme el verano se hubiera ido.
No hubo suerte.
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Etiquetas: Tiempo de habitaciones separadas
viernes, junio 19, 2009
Me he pasado toda la semana leyendo en los periódicos y escuchando en las tertulias espontáneas de las cafeterías, insultos, improperios y descalificaciones varias por parte de un más que funcionariofóbico respetable. Aunque tratándose de un país en el que la gente se manifiesta por miles para salvar a un equipo de fúrbol manquepierda, mientras se está quedando al paro, no sé por qué me sorprendo. Y es que una tiene cierto afán corporativista y es escuchar la palabra funcionario seguida del término vago y recordarle a quien lo considere oportuno, o no, que yo soy funcionaria y que suelo levantarme a las cinco y media de la mañana, horario no necesariamente incompatible con ser una vaga, pero les aseguro que una no se levanta a esas horas para pasarse la jornada laboral leyendo el periódico como afirman las malas lenguas.
Yo, que no cobré ese dinero por causas que no vienen a cuento y que en todo caso son testimonio de una tremenda injusticia y del mal desarrollo de ese plantemiento, me tuve que tragar durante meses las vacaciones, viajes y abrigos de visón que mis estimados colegas se agenciaron con ese dinero que nunca tuvieron que recibir y sin embargo nadie les obligará a devolver. Confesaré que mi primer y maquiavélico impulso fue descolgar el teléfono y desearle a Blancanieves sin sus siete enanitos un "feliz" descanso vacacional en Benidorm a costa del erario público, cuando recordé que este año y gracias a la hucha de la carrera profesional indebida, había cambiado el destino patrio por la francesa Provenza y una no le tiene querencia a amargarle las vacaciones a nadie que tenga el gusto y el placer de veranear entre campos de lavanda. No hizo falta en todo caso, fue ella la que llamó toda indignada.
Virgencita, virgencita, que me quede como estoy; que estará diciendo Ana Rosa (Migoya) mientras yo me quedo con la duda de a cuento de qué viene esto de poner a media Función Pública en su contra, la otra media ya lo estaba, se encargaron con gran eficacia, por cierto Pin y Pon (léase Riopedre y el innombrable Consejero a lo John Wayne) y a toda Asturias (funcionariofóbicos del mundo, uníos) contra la Función Pública.
Publicado por Daeddalus 2 perdidos en el laberinto
Etiquetas: Área de prioridades
lunes, junio 15, 2009
Esperándome (a tiempo)
34... me siento frente al espejo y me repito, cual mantra, esa cifra una y otra vez. Mi recién estrenada edad. Qué le voy a hacer si nací un 13 de junio del año 1975, aunque yo no eligiera ni ese viernes, ni esa madrugada y ni tan siquiera la vida.
Probablemente si en este mismo instante alguien me preguntara mi edad, mentiría. Inconscientemente retrocedería en el tiempo, nunca me acostumbré a los 33, dudo que lo hago con los 34. Bien sé que no son ellos los que pesan y que en todo caso no hay que quitarle años a la vida, sino ponerle vida a los años; pero una se hace irremediablemente vieja para algunas cosas y mucho más se siente cuando se coloca frente a ti una veinteañera.
Si de mí dependiera me hubiese quedado eternamente en los 28, sin cruzar la frontera del 3, instalada en un número par de eterna juventud teñida de una incipiente madurez pese a que trate de recordar ahora quién y cómo era, dónde estaba o qué hacía yo a esa edad y vagamente lo recuerde.
Mi compañera de piso, rival pese a todo en tantas cosas y de la que me despedí sin despedirme. Dejamos de hablarnos, de vernos, de tratarnos... hasta que carambolas del destino, una noche de un 23 de junio años después y tras arder la hoguera, cruzamos nuestros caminos en calidad de acompañante y ex-acompañante del Holandés errante. Evidentemente fingimos no reconocernos.
Aquel trabajo de secretaria-intérprete con el inefable Herr Janeck siempre al otro lado de la línea. El Jefe que no quería ejercer de jefe, y el colega que en cambio si lo pretendía. Logroño y la peor borrachera de mi vida en sus brazos. Cruising Carrefour.
Sin olvidar por supuesto al menos a un par de impenitentes hombres que me acostaron en su regazo, testigo de mis insomnios.
No me imagino lugar mejor para vivir que hacerlo entre unos aturdidos 28 y una canción de Bruce.
Publicado por Daeddalus 6 perdidos en el laberinto
Etiquetas: Geografía privada
Si yo sólo...
"Toi bien agora,
mientres la muga
ruxe y faluca escontra'l suelu
y nos cristales,
y el cuerpu
entovía húmedu d'amor
envueltu nuna bata.
Dixístime hasta llueu
y soplásteme pol aire
un besu.
Quiciabis ye la tardi
que ta rara,
o esti quietu silenciu
danzando na mio casa,
que camiento
que si un día nun volvieres
saborgaría un tastu más amargu
qu'esti café
qu'afuma nesta taza."
María Teresa González
...pero ese día hace mucho que se instaló para no irse y a mí ni siquiera me gusta el café.
Publicado por Daeddalus 3 perdidos en el laberinto
Etiquetas: Persigo un sueño... mañana seguiré
domingo, junio 14, 2009
Más tarde alguien me tendió su mano y me llevó lejos. Extraña magia la de los aviones que hacen que esta mañana me despertara en Hythe, a orillas del canal de la Mancha y horas después esté aquí, de vuelta a la cruda realidad. Ésa que me recuerda que ayer fue mi cumpleaños, aunque quise olvidarlo entre cervezas y planes que nunca se harán realidad, que tengo que pedir cita con el dentista y el martes tengo que presentar la declaración de la renta, que mañana es lunes, pero no uno cualquiera, sino el peor de todos los lunes, el del regreso de las vacaciones, que ya no volverán hasta el otoño.
La maleta sin deshacer, montones de ropa sucia, la nevera tan vacía como el trocito de alma que aún me queda y ya he puesto en venta... Ojalá todo fuera tan fácil como abrir las ventanas y dejar que corra el aire, hacer la compra, poner sábanas limpias y levantar las alfombras.
Durante unas semanas dejé de ser yo, pero el tiempo siempre pone las cosas en su sitio. Tan sólo espero que a partir de ahora aunque siendo la misma, consiga ser distinta.
Publicado por Daeddalus 11 perdidos en el laberinto
Etiquetas: Después del mar