Después de mí
si en mi cama no figura ni un buen beso de alquiler"
Ricardo Arjona
Hace tiempo que asumí que padezco algún tipo de trastorno socio-sentimental. Mi madre, con su particular filosofía y su habilidad para convertirme en culpable de todo, diría que simplemente tengo la tendencia de valorar a destiempo, es decir, que sólo cuando pierdo algo, o más bien a alguien, es cuando me doy cuenta de lo mucho que lo necesitaba (necesito).
Tal vez sea cierto. Probablemente comparta esa actitud con gran parte de la humanidad, lo que en absoluto me sirve de consuelo. Indicios de inmadurez, de egoísmo o de intolerancia pero lo cierto es que si no hace tanto me pasó con D. cuando le mandé a paseo y semanas después andaba echándole (y aún le echo) de menos, aunque de ser sincera probablemente eche más de menos a la persona que yo era junto a él que a su propia persona.
Ahora vuelve a ocurrirme de nuevo cuando ya no está y no tengo oportunidad de rechazar sus invitaciones al café que nunca tomo.