Shelter from the storm
Me gustaría explicártelo. Sé que lo entenderías, supe que lo sabías, de seguro que acabaré por hacerlo. Siempre lo hago, más temprano que tarde, aunque tengas tus dudas. Y tú preguntarás y dejarás de sonreir adoptando ese aire de superioridad docente mientras damos vueltas y vueltas sin rumbo ni dirección en una ciudad fantasma a altas fiebres de la madrugada. Me llamarás E. por cuarta vez y yo dudaré si corregirte. Demasiadas letras E. en esta historia. Firmamos igual, te gustaba esa coincidencia. Más tarde supe de los fantasmas que compartían esa firma. Ya era tarde, la otra E. se me había adelantado, también quiso ser tu refugio en la tormenta.