Soy consciente de que a veces, de cuando en cuando, demasiadas veces, parezco o soy antipática; y snob, pedante, petarda, fría, borde, egocéntrica y neurótica. Puede que no sólo lo parezca, sino que por momentos efectivamente lo sea. O puede que ésa, de forma más o menos inconsciente, sea la imagen que venda.
No sé si somos lo que somos o lo que los demás creen que somos. Y en cambio sí sé que una no se la puede pasar buscando la aprobación de los demás y que debería importarme menos que nada que todos ustedes piensen que la que aquí escribe es ciertamente antipática e histérica, porque seguro que más de uno lo piensa.
Pero a veces sí, a veces quiero caer bien, quiero gustar... No sé si lo consigo. Ni siquiera sé si me gusto a mí misma.
¡Qué duda cabe que eres muy especial! Como tu dices, al que no le guste que no te visite. Peor sería que no te gustases a ti misma pero me da la sensación que, salvo en momentos críticos, estas contenta de ser como y quien eres. Te felicito. Besotes.
Yo no te conozco (al menos en persona) pero me gusta lo que veo (leo) y en palabras de Carlos Chaouen "Que nadie sea absuelto por no quererse y ¡vive! porque querer es vivir con creces" o de Serrat "Cada quien es cada cual, y baja las escaleras como quiere". Estoy con Susana, al que no le guste que no te visite. Besos virtuales, T.
Deja de joderte viva pa vino, por Dior bendito...Si te conociera te daría un bofetón, lo primero. Lo segundo sería invitarte a un riquísimo gintonic de Hendricks con pepino.
Bueno, a las visitas a las que no les resulto especialmente gratas ya hablé en su momento (y fue un buen momento)... Ahora más bien hablaba de las personas de ahí afuera...
Yo creo que somos todo. A la vez o por trazos, pero podemos ser todo. Que cada uno escoja la parte que más le guste, la que le incomode o la que idolatre. Nosotros no podemos escoger siempre... vamos con el lote completo
A mi no me gustas nada, vengo a visitarte asiduamente porque soy masoca.
Hace tiempodecidí que no puedo volverme del reves para gustarle a los que escribieron las normas. Solucion: Ser yo y gustarle a quien alguien como yo les guste.
Pues aunque no siempre te comente, debo decirte que yo te considero una persona muy interesante y creo que si te conociera en persona me caerías bien. ;) Ser uno mismo es lo mejor que se puede ser. Lo otro sería demasiado difícil, uf.
Como te han dicho antes, creo que lo más difícil es gustarse a uno mismo. Sobre todo, porque no se puede jugar a ser un personaje, como algunas veces hacemos con los demás. Enfrente del espejo estás tú mismo, y punto.
De todas formas, yo sigo firmemente convencida de que todos, hasta los que parecemos bordes o fríos, tenemos nuestro encanto.
Y es que soy muy mía y a la vez muy del cosmos, muy de las tinajas y de los moldes de galleta, de las vainas y los pomos cromados, de la cola y el carril más lento, de embalsamadores y taxidermistas, del rincón del aburrido; soy muy de los desprendidos de la crítica, fiestas provocadas y tijeretazo en casa, del orden cosas y cosas por vicio. Soy muy de todo esto y de aún más cosas. Sólo espero que alguien me reclame... sería muy violento tener que hacerlo yo misma...
Deja tus paranoias o tus deseos, gritos al aire, diarios, confesiones, declaraciones de amor o de guerra, o simplemente tu firma, tu mensaje, tus besos, saludos o consejo, bromas o entusiasmo, reminiscencias o cañones recortados, y ya descubriremos si tenemos algo de lo que hablar...
Ser ese pincel aguado por la lluvia que esboza en cada bocanada una bahía, dos volcanes y diez maneras de decir lo que deseas. Una bandada de gaviotas. La ginebra. Las noches sin futuro. Una colección de lunas llenas. Las verbenas de barrio. Una tormenta sobre el azul inmenso del océano. Arrastrando la cobija. Tristezas a la carta por alegrías. Billie Holliday rasgando la noche. Una visita imprevista y deslenguada. Los calvos que se quitan el sombrero. Las noches "nuremberianas" al calor del Eulenspiegel repletas de ron, humo y conversaciones. Aquella voz, aquel acento."Mis" poetas: Á. González, Huidobro o Cernuda. La lluvia que parió charcos y barro. Viajar en tranvía. Volar cometas. Un par de botas sucias. El canto del urogallo. Alain Delon en "Rocco y sus hermanos". Caminar sobre hojas secas. Las tímidas que salen respondonas. Aviones que despegan. Las rosas amarillas, los lirios, las violetas. Las raras excepciones. ARJONA (con mayúsculas). Medianoche en una estación de tren. La honestidad brutal de Calamaro. Una tormenta sobre el azul inmenso del océano. Aquella buhardilla en la Peissenbergstr. Silvana Mangano en "Arroz amargo". Pisar charcos. El 14 (y la lluvia) de abril. Mi chupa de cuero. La Coca-Cola (nadie es perfecto). Besos con risas. Silvio y Ojalá como coartada. Lengua con besos. El castellano de Umbral. Esencia de playa y sal de un lugar donde habitaban las gaviotas. Pisar charcos. Un vestido y un amor. Salitre 48. EL hombre del piano. Luka, el niño del 2º piso. Compay y Celia, el son y la salsa de luto. La primera mirada por la ventana al despertarse. Las noches que sonríen en forma de luna. Estoy Bartok de todo. El olor a tiempo desgastado. Simon & Garfunkel. Waits & Cohen. Los trenes que viajan hacia el este. Rosas a Rosalía. En Lisboa, sobre lo mar. El cambio de estaciones. Dylan y su hijo Jakob. Un amanecer en la playa del Silencio. El piano ha estado bebiendo. Puentes que se cruzan en ambos sentidos. El Urriellu. Una Delirium Tremens. Las carreteras secundarias. Un otoño de párpados caídos. Los domingos al sol en el Englischer Garten. Camarón sin camisa. Frambuesas en la tarta. Las sesiones de madrugada. Las montañas mágicas de esta tierra que plantó mi corazón recibiendo el regalo de la lluvia. Chavela por Jose Alfredo. Los labios que aprovechan los rincones más olvidados, más olvidables. Veloso y su fina estampa. El miedo, el futuro incierto, el camino, la búsqueda. Je vous ai apporté des bonbons parce que les fleurs c'est périssable. Los que pudieron ser y no han querido... Dream, baby dream.
19 perdidos en el laberinto:
¡Qué duda cabe que eres muy especial! Como tu dices, al que no le guste que no te visite. Peor sería que no te gustases a ti misma pero me da la sensación que, salvo en momentos críticos, estas contenta de ser como y quien eres.
Te felicito.
Besotes.
Yo no te conozco (al menos en persona) pero me gusta lo que veo (leo) y en palabras de Carlos Chaouen "Que nadie sea absuelto por no quererse y ¡vive! porque querer es vivir con creces" o de Serrat "Cada quien es cada cual, y baja las escaleras como quiere".
Estoy con Susana, al que no le guste que no te visite.
Besos virtuales,
T.
Deja de joderte viva pa vino, por Dior bendito...Si te conociera te daría un bofetón, lo primero. Lo segundo sería invitarte a un riquísimo gintonic de Hendricks con pepino.
Bueno, a las visitas a las que no les resulto especialmente gratas ya hablé en su momento (y fue un buen momento)... Ahora más bien hablaba de las personas de ahí afuera...
Lo más importante y más difícil, a mi modo de ver, es gustarse a sí mismo.
Saludotes
Yo creo que somos todo. A la vez o por trazos, pero podemos ser todo. Que cada uno escoja la parte que más le guste, la que le incomode o la que idolatre. Nosotros no podemos escoger siempre... vamos con el lote completo
Me gusta House, ¿por qué no habrías de gustarme tú?
Reina: Me lo merezco y no sólo el gin-tonic...
Conguito: Completamente de acuerdo, en ocasiones necesitamos toda una vida para perdonarnos.
Nebroa: También de acuerdo. Tenemos muchas caras y algunas personas tienen la habilidad de conseguir que mostremos la mejor.
Anto: Estoy completamente segura de que te gustaría... y no soy adicta a la vicodina.
A mi no me gustas nada, vengo a visitarte asiduamente porque soy masoca.
Hace tiempodecidí que no puedo volverme del reves para gustarle a los que escribieron las normas.
Solucion: Ser yo y gustarle a quien alguien como yo les guste.
Guille: Yo también, aunque a veces puede que no lo parezca.
Si lo parece, siempre.
Cuando le gustas a alguien, le gustas y punto. Aunque seas fría, borde y todo lo que tú quieras...
Pues aunque no siempre te comente, debo decirte que yo te considero una persona muy interesante y creo que si te conociera en persona me caerías bien. ;)
Ser uno mismo es lo mejor que se puede ser. Lo otro sería demasiado difícil, uf.
Aida: Incluso a veces gustas por ser fría, borde y demás... aunque el encantamiento pasa rápido.
Gracias Sonix. Yo a ti tampoco te conozco, pero ya me caes bien por lo que leo.
Como te han dicho antes, creo que lo más difícil es gustarse a uno mismo. Sobre todo, porque no se puede jugar a ser un personaje, como algunas veces hacemos con los demás. Enfrente del espejo estás tú mismo, y punto.
De todas formas, yo sigo firmemente convencida de que todos, hasta los que parecemos bordes o fríos, tenemos nuestro encanto.
Un beso
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