jueves, febrero 02, 2012

Para que veas que no te guardo rincón*




                                      No es que me conforme, ni me basten unos pocos minutos o apenas media hora; tampoco que me sobren los días...


       Que yo siempre he necesitado tiempo para ser certidumbre y evidencia,
para ser vaivén de palabras y silencios.


 Y como decía el poeta, 'qué pena, amor, que tu presencia dependa tanto de tu cuerpo'.







P.D. Audrey Hepburn


*Nicanor Parra

4 perdidos en el laberinto:

flower dijo...

Esta mujer es tan bonita que le quedan bien hasta las ojeras.

Me gusta la frase de Nicanor Parra, muy ingeniosa!

Y sí, es una pena que la presencia de las personas dependa de sus cuerpos. Y eso que yo aguanto de lo lindo manteniendo relaciones a distancia, telefónicas, a través de cartas y mensajes, de emociones sin palpar pero sentidas...

Un beso, mua,

PD: un placer quen o te vayas dle todo, jijijiji.

Fiebre dijo...

¡Y qué bien que me mordiera la lengua los días que veía en el móvil una entrada de por ahí abajo!
Y pensaba que tenía, como a los grandes, que rendirte un último tributo en comentarios...pero algo me decía que no me daba la gana,que no me abandonan porque sí, que no ni ná.

Entrar aquí, aunque no tenga ni pajolera (que muchas veces sí) de lo que hablas, es un lujo.
Un acompasar la respiración.

Ana Laura dijo...

No conozco al poeta que dijo eso, pero ¡qué razón tiene! Yo amo a alguien que casi nunca está en cuerpo, pero de presencia constante.

Un saludo, me ha gustado mucho la entrada.

semilla dijo...

Pues lo siento pero no...a veces la presencia no depende del cuerpo, la llevas dentro de tí...y aunque suene cursi así lo siento o lo sentí...que ya estoy curada

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