lunes, febrero 01, 2010

Y sin embargo



Siempre me digo que utilizo esto para hablar conmigo misma. Para recordarme quién soy, hacia donde voy, de donde vengo y si por el camino yo conmigo misma me entretengo.

Pero no es cierto, o no del todo o no siempre. En realidad, demasiadas veces, cuento aquí lo que me gustaría contar en otro lado. La inoportunidad, el pudor, la desgana, el miedo o la cobardía provocan el trueque. Yo escribo aquí, donde tú no lo lees (tú o él o ella o ellos, qué poco importa el destinatario final). Y aunque también sea cierto que cuento ahí afuera, nunca es igual. Porque aquí soy yo, allí soy lo que tú crees que soy, y me temo que eso no siempre coincide.

Incluso es probable que me equivoque y él si esté al otro lado. Quizás ella llegó por casualidad o tú prometiste no volver a entrar y no has cumplido una promesa que nunca te pedí y sin embargo firmemente creí. De ser así podría ahorrarme el esfuerzo de las llamadas, los correos y las conversaciones pendientes. Utilizar esto como único medio de comunicación.

Y sin embargo, supongo que prefiero seguir disfrutando de un presunto anonimato que hace tiempo perdí. Mantener la ilusión de la desconocida o desconocido que desde el otro lado, de cuando en cuando, voluntariamente se asoma. Seguir creyendo que tú no vas a leer esto y que por tanto no reconocerás lo que encierran las palabras de Sabina. Puede que incluso ni te dieses por aludido. Pero ésa... es otra historia.



3 perdidos en el laberinto:

Anónimo dijo...

Vaya nadie se ha dignado contestarte, supongo que porque despues de leerte les habrá entrado la depresión.

Daeddalus dijo...

Definitivamente, este blog ha alcanzado la mayoría de edad.

Anónimo dijo...

Me encanta... Anonimo siempre fue un apellido que no me dijo nada...
ZonuladeZinn

Related Posts with Thumbnails