Amos a ver Dae... con el portero que tienes que está muerto por tus huesos... ¿no te sube en brazos? Tirale la indirecta... seguro se ofece gustoso. Besi
Cuando se está cansado, hay que descansar (y cuidar la anemia). Yo también sufrí durante algunos años un 5º sin ascensor. Algunos domingos de madrugada, hacía noche en las escaleras por falta de aliento (y de orientación) antes de llegar al último piso.
Sin duda Aida, y si a ése le unimos el físico, ni te cuento...
Luis, el portero creo que no me llega ni al hombro, muy fornido el hombre no es...
Rose, me temo que este blog refleja tan sólo una pequeña parte de la realidad, aunque es bueno tu consejo...
Estimado Doctor, esa opción está completamente descartada. Yo necesito la luz y no necesitar cortinas...
Estimado Tordon, no sabía yo la existencia en mi persona de energías ocultas...
Paciente asturiano, no es falta de ascensor (que a falta de uno, tengo dos) sino de libre voluntad de subir a pie los cinco pisos (sin contar el entresuelo).
Vaya, yo pensaba que las escaleras eran por obligación. Según estudios recientes, los espejos mienten más que c.... A ver si las escaleras y la anemia crónica te van a jugar una mala pasada.
Y es que soy muy mía y a la vez muy del cosmos, muy de las tinajas y de los moldes de galleta, de las vainas y los pomos cromados, de la cola y el carril más lento, de embalsamadores y taxidermistas, del rincón del aburrido; soy muy de los desprendidos de la crítica, fiestas provocadas y tijeretazo en casa, del orden cosas y cosas por vicio. Soy muy de todo esto y de aún más cosas. Sólo espero que alguien me reclame... sería muy violento tener que hacerlo yo misma...
Deja tus paranoias o tus deseos, gritos al aire, diarios, confesiones, declaraciones de amor o de guerra, o simplemente tu firma, tu mensaje, tus besos, saludos o consejo, bromas o entusiasmo, reminiscencias o cañones recortados, y ya descubriremos si tenemos algo de lo que hablar...
Ser ese pincel aguado por la lluvia que esboza en cada bocanada una bahía, dos volcanes y diez maneras de decir lo que deseas. Una bandada de gaviotas. La ginebra. Las noches sin futuro. Una colección de lunas llenas. Las verbenas de barrio. Una tormenta sobre el azul inmenso del océano. Arrastrando la cobija. Tristezas a la carta por alegrías. Billie Holliday rasgando la noche. Una visita imprevista y deslenguada. Los calvos que se quitan el sombrero. Las noches "nuremberianas" al calor del Eulenspiegel repletas de ron, humo y conversaciones. Aquella voz, aquel acento."Mis" poetas: Á. González, Huidobro o Cernuda. La lluvia que parió charcos y barro. Viajar en tranvía. Volar cometas. Un par de botas sucias. El canto del urogallo. Alain Delon en "Rocco y sus hermanos". Caminar sobre hojas secas. Las tímidas que salen respondonas. Aviones que despegan. Las rosas amarillas, los lirios, las violetas. Las raras excepciones. ARJONA (con mayúsculas). Medianoche en una estación de tren. La honestidad brutal de Calamaro. Una tormenta sobre el azul inmenso del océano. Aquella buhardilla en la Peissenbergstr. Silvana Mangano en "Arroz amargo". Pisar charcos. El 14 (y la lluvia) de abril. Mi chupa de cuero. La Coca-Cola (nadie es perfecto). Besos con risas. Silvio y Ojalá como coartada. Lengua con besos. El castellano de Umbral. Esencia de playa y sal de un lugar donde habitaban las gaviotas. Pisar charcos. Un vestido y un amor. Salitre 48. EL hombre del piano. Luka, el niño del 2º piso. Compay y Celia, el son y la salsa de luto. La primera mirada por la ventana al despertarse. Las noches que sonríen en forma de luna. Estoy Bartok de todo. El olor a tiempo desgastado. Simon & Garfunkel. Waits & Cohen. Los trenes que viajan hacia el este. Rosas a Rosalía. En Lisboa, sobre lo mar. El cambio de estaciones. Dylan y su hijo Jakob. Un amanecer en la playa del Silencio. El piano ha estado bebiendo. Puentes que se cruzan en ambos sentidos. El Urriellu. Una Delirium Tremens. Las carreteras secundarias. Un otoño de párpados caídos. Los domingos al sol en el Englischer Garten. Camarón sin camisa. Frambuesas en la tarta. Las sesiones de madrugada. Las montañas mágicas de esta tierra que plantó mi corazón recibiendo el regalo de la lluvia. Chavela por Jose Alfredo. Los labios que aprovechan los rincones más olvidados, más olvidables. Veloso y su fina estampa. El miedo, el futuro incierto, el camino, la búsqueda. Je vous ai apporté des bonbons parce que les fleurs c'est périssable. Los que pudieron ser y no han querido... Dream, baby dream.
8 perdidos en el laberinto:
Yo sigo pensando que el peor cansancio es el mental...
Ánimo!
Amos a ver Dae... con el portero que tienes que está muerto por tus huesos... ¿no te sube en brazos? Tirale la indirecta... seguro se ofece gustoso. Besi
Jo, es que ese espejo es como el de las ferias, que está trucado.
Yo si fuese tú me desaría en seguida de él y cada vez que me tuviese que pintar o vestir, me vería en este blog que seguro te refleja mejor.
Mi querida amiga. ¿Ha probado a mudarse al entresuelo?
Siempre suyo
Un completo gilipollas
Tómese un descanso,estimada Daedalus, lávese el pelo, bese a alguien,relájese,reflexione, explore todas sus energías ocultas.
Porque -ya lo decían los romanos-si tienes el arco siempre tenso, acabará por romperse.
Besotes
Cuando se está cansado, hay que descansar (y cuidar la anemia). Yo también sufrí durante algunos años un 5º sin ascensor. Algunos domingos de madrugada, hacía noche en las escaleras por falta de aliento (y de orientación) antes de llegar al último piso.
Sin duda Aida, y si a ése le unimos el físico, ni te cuento...
Luis, el portero creo que no me llega ni al hombro, muy fornido el hombre no es...
Rose, me temo que este blog refleja tan sólo una pequeña parte de la realidad, aunque es bueno tu consejo...
Estimado Doctor, esa opción está completamente descartada. Yo necesito la luz y no necesitar cortinas...
Estimado Tordon, no sabía yo la existencia en mi persona de energías ocultas...
Paciente asturiano, no es falta de ascensor (que a falta de uno, tengo dos) sino de libre voluntad de subir a pie los cinco pisos (sin contar el entresuelo).
Vaya, yo pensaba que las escaleras eran por obligación.
Según estudios recientes, los espejos mienten más que c....
A ver si las escaleras y la anemia crónica te van a jugar una mala pasada.
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