martes, diciembre 01, 2009

Incidencia

Sábado pasado a una hora incierta. Tras las típicas y tópicas frases de acercamiento inicial viene el: "Por cierto, me llamo E. y soy de *".

- ¿No tienes un segundo nombre, un diminutivo, un apelativo cariñoso, un apellido sonoro por el que te llamaran en tu infancia de colegio?. No puedes (puedo) llamarte E. Esta noche no me apetece cenar sopa de letras monocorde.

Parecía simpático... Tuvo el (buen) gusto de acercarse a mí.

4 perdidos en el laberinto:

Anónimo dijo...

Estimada Dae, en el caso expuesto, el (buen) sobra ponerlo entre paréntesis.

http://www.youtube.com/watch?v=eDQHnA8skfY

Fiebre dijo...

¿Y cómo lo haces?

A mí ya ni se me acercan.
O doy "miedo" (eso dicen), o la de al lado tiene las tetas más grandes...

Daeddalus dijo...

Es que yo soy la de al lado con las tetas más grandes...

Anónimo dijo...

Que el mundo sepa que Dae tiene las tetas grandes jajajaja.

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